Internet está lleno de consejos, de todo y para todo, en el mejor de los casos sin mas garantía de calidad y sin más autoridad que el número de visitas.
Nosotros en Seopolítica no somos de dar consejos, somos como nos gusta decir en nuestra web, más de acompañar a nuestro cliente en todo el proceso. Por eso en este post no vamos a decirte cómo tienes que hacer las cosas pero si te vamos a hablar de las cuestiones que te pueden llevar a cometer errores que te retrasen a la hora de alcanzar tus objetivos o que te aparten de ellos, cuando te dedicas a la política:
Pensar que no necesitas asesoramiento político
Ejercer un oficio es relativamente sencillo, basta con tener formación sobre las tareas que se desempeñan y buena voluntad. Otra cosa es ejercer ese oficio de forma diferenciada y con más éxito que la competencia. La diferencia estriba siempre en una mezcla de experiencia, diversificación y evaluación permanente, y esto vale para cualquier oficio, también para el de gestor público.
La única manera que tienes de tener ventaja sobre tus competidores políticos es no estar solo en tu tarea y que ademas los que te acompañan lo hagan de una forma profesional, objetiva, partiendo de datos y no solo de sensaciones. Con un equipo que te ayude y que no aspire a sustituirte.
Ofrecer tarde una respuesta a un problema
Todo va muy rápido, la diferencia entre los que tienen éxito y los que no a menudo está en la capacidad de los primeros para tomar decisiones acertadas que afectan al 80% de un problema con el 20% de información necesaria. Si esperas a tener toda la información probablemente tu rival se haya adelantado y tome la iniciativa. Si llevas un plan, tienes un calendario y estás documentando los pasos que estás dando, tendrás siempre información suficiente para adelantarte.
El control de la agenda es tu prioridad principal
Si no logras influir en lo que se habla en cada casa, en cada familia, en cada encuentro de amigos, otro lo hará y tu solo serás uno más entre el ruido… Tienes que intentar hegemonizar la conversación social, colocar ahí tus temas y tus propuestas, ofrecer un espacio para que el debate se produzca con tus reglas y con tus enmarques, no es una tarea fácil, tiene mucho que ver con la dimensión de tu espacio político, para lograrlo no solo hay que entender muy bien a la sociedad y tener montones de sistemas de escucha social activa, además hay que tener dinero para ocupar espacio, comprándolo.
En la batalla mantente vivo para luchar mañana
No se gana siempre, ni en una discusión, ni en la hegemonía del relato, ni en una elección, ni en una batalla por el poder dentro de la organización, si tus batallas son siempre a todo o nada más pronto o más tarde te quedarás con nada. No hace falta que seas como Frank y Claire Underwood en House of cards, pero si vas a luchar por algo es mejor que tengas un plan por si lo consigues y otro por si lo pierdes. Cómo dice mi amigo Rubén Sánchez se aprende mucho más de una derrota que de un éxito.
Creer que tu problema es que no comunicas bien
Cuando se gobierna bien o se gestiona bien, comunicar bien es fácil, no conozco buenos programas electorales o buenas políticas que se cuenten mal. Si tienes un proyecto y lo estás sacando adelante, es seguro que llevas la iniciativa y si llevas la iniciativa contarlo es lo más fácil del mundo.
Mide tus políticas y tus proyectos con los de tus rivales, no midas tus cuentas en redes sociales ni el número de tus impactos. Insistimos si tienes ideas y proyectos, contarlo va a ser muy sencillo.